Cubiertas de piscinas en Mallorca
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Instalación de cubiertas para piscinas en Mallorca
Las cubiertas de piscinas son accesorios esenciales para todo tipo de piscinas. Con la cubierta de la piscina adecuada, el área de la piscina se beneficiará de una protección ideal, y los usuarios finales disfrutarán también de múltiples ventajas tales como evitar caídas accidentales en su interior, pérdida de agua por evaporación y el mantenimiento de temperatura en caso de tener instalada una calefacción.
Lonas a medida para piscinas en Mallorca
A continuación se explican brevemente las razones por las que se aconseja cubrir la piscina.
Cubierta de Seguridad
Primero y ante todo, una cubierta de piscina incrementa la seguridad de todos los usuarios que acceden al área de la piscina. Gracias a las lamas flotantes que cubren la superficie del agua en su totalidad, los visitantes (personas y/o mascotas) no corren el peligro de caer accidentalmente a la piscina, que es un riesgo que sí existe cuando no hay ninguna otra medida de protección. Algunos modelos también incorporan superficies antideslizantes para proporcionar una mayor seguridad.
Adaptabilidad y versatilidad
Sean cuales sean el espacio y el tamaño, las cubiertas se pueden ajustar a las dimensiones exactas de cada proyecto. En el caso de las cubiertas automáticas también permiten una mejor personalización de la piscina en general. Además, se pueden diseñar como parte de la instalación desde el principio o se pueden añadir fácilmente en una reforma posterior.
Durabilidad
Las cubiertas de piscinas están hechas para durar, si bien también brindan una mayor durabilidad a todo el entorno en su conjunto. Por ejemplo, las cubiertas de piscina en interiores evitan la condensación en un espacio cerrado y, por consiguiente, eliminan también la posibilidad de daño a los equipos y materiales próximos. Todos los componentes de una cubierta de piscina deben estar fabricados con materiales anticorrosivos e impermeables.
Eficiencia y sostenibilidad
Al cubrir la piscina, se reduce la pérdida de calor, lo que se traduce en un mayor ahorro energético puesto que no hay que recalentar el agua. Esto es, se consigue un ahorro operativo independientemente del sistema de calefacción instalado.
También se evita la evaporación hasta en un 80 %, al reducir la deshumidificación y los nuevos aportes de agua. En el caso de piscinas que cuentan con un sistema de desinfección química, una menor evaporación supone también un ahorro en el uso de productos químicos. Es decir, que no solo ahorramos dinero, sino que también protegemos el medioambiente.
Bajas exigencias de mantenimiento e higiene
Una cubierta de piscina facilita el acceso al motor y a las partes móviles, lo que, desde un punto de vista operativo, la convierte en una opción que requiere un mantenimiento mínimo. Al reducir la cantidad de partículas en suspensión y evitar la caída de suciedad y residuos al agua, las cubiertas también facilitan el mantenimiento y la limpieza de las piscinas.
Ahorros presupuestarios
Una cubierta de piscina actúa como una barrera térmica que evita la pérdida de calor y la evaporación, por lo que supone un importante ahorro presupuestario. Ya no será necesario rellenar tanto el agua de la piscina, y además se ahorra en productos de tratamiento para la desinfección del agua y se reducen los costes relacionados con el calentamiento del agua.
Permite ahorrar agua, reduce la formación de algas, impide la precipitación de partículas al agua y disminuye la necesidad de filtración… En definitiva, todo son impactos positivos en el presupuesto.